Cierta persona decide utilizar el espacio público para hacer una denuncia en graffiti. En medio de la acción alguien le descubre y escapa.
La frase queda escrita solo en su inicio y tan solo se puede interpretar una negativa atemporal y neutra.
Sin quererlo el autor hizo una denuncia abierta e interactiva que nosotros aprovechamos para demandar el silencio institucional hacia el ciudadano en todas sus aristas; como motor generador de una conciencia colectiva, de infraestructas de lo común, etc. Un mensaje negativo tan descarado y evidente como el que nos comunican a diario nuestros dirigentes.
Por Darío Tobes 23.08.2010