Si me pongo a reflexionar sobre ser ciudadano, inevitablemente (por características propias de mi personalidad) voy a pensar en mi, en el rol de ciudadana que cumplo (o no cumplo), en lo que creo que debería ser un ciudadano, en que cosas relaciono con esa palabra, en la ciudad que habito, en las ciudades en general, en los derechos que tengo y a veces ni conozco, en cuan buen ciudadano se puede ser….
Entonces voy considerando que tales preguntas no me llevan a conclusiones específicas, de hecho mi rol como ciudadana que habita la Córdoba actual muchas veces puede pasar como pésimo y otras como aceptable (depende siempre para quien, claro). También voy considerando que no conozco el ciudadano modelo, ni el ilustre, y que los trámites para conseguir la ciudadanía Italiana heredada de mi bisabuelo se están volviendo tediosos pero van a permitirme conocer otros países. También Repaso que mi objetivo hacia el bien público como ciudadana no va más allá de pagar mis impuestos, estar al tanto de lo que pasa, no destruir los espacios que transito e intentar ayudar a quien pueda, pero nunca es demasiado claro!, recuerdo en los momentos en que más ciudadana me sentí y los cuento como los días en que fui a votar, las veces que puse mi firma y mi presencia para participar de algo “social” (por así decirlo), las veces que un policía me pidió mi DNI para corroborar quien soy, cuando tramité mi pasaporte, los intentos de ciudadanía Italiana, en fin, esas veces que de pronto recordas que además de ser una persona que habita este mundo, una ciudad, una casa, un espacio, etc., también sos alguien que co-existe en una sociedad, y te comportas de acuerdo a las reglas que dicha sociedad te pone, actúas como ciudadano, accionas como se espera, etc, pero también te tomás una cerveza en la vereda de un bar, salis a bailar, te subís a los bondis, caminas mucho, paseas, fumas uno en la cañada, escuchas los recis gratis en la plaza, aprovechas el poco espacio verde que hay, presciencias espectáculos, bailas, puteas, te quejas del tráfico, de los edificios, conoces un balcón desde el cual se ve la ciudad, te sentís solo en medio de un gran multitud, o nunca te sentís solo ya que la ciudad siempre te acompaña,…….. Mucho puedo seguir divagando, mucho puedo seguir explorando, no obstante el sentirme ciudadana creo que siempre va a ir acompañado del sentido de identidad y pertenencia que vaya desarrollando a lo largo de mi vida y que generalmente no puedo separarlo del sentirme además artista! Soy entonces una “ciudadana artista”, ese es mi rol en este espacio que habito, la ciudad.
p/d: No puedo dejar de agregar a esta nota que Mi deseo es que todos seamos ciudadanos con los mismos derechos, sin excepción alguna!
Por Natalia Pretto 16.09.2010